"Hoy en día, los restos del Sirius se encuentran diseminados alrededor del Bajo de Fuera, zona declarada reserva integral desde 1995, donde sólo se permiten algunos tipos de pesca artesanal. Gran parte de los restos del buque, como las calderas y diversas planchas del casco, se encuentran diseminados por la cara oeste del bajo, a lo largo de una pendiente suave. La popa se encuentra a 47 metros de profundidad. La proa se encuentra en la cara este, pared vertical de mar abierto, a 70 metros de profundidad, junto a los restos de otras naves. Hasta 1995 se podían visitar libremente los restos, tras la declaración de la zona como Reserva Integral de las Islas Hormigas, sólo es posible bucear con titulaciones del MAPA y obteniendo una serie limitada de permisos en la Consejería de Medio Ambiente del Gobierno Regional de Murcia, organismo que regula la reserva y tramita los permisos."
Después de aquel día 13 de agosto en que el Sirio se partió en tres (la popa, que descansa hundida a 47 metros de profundidad, la proa que cayó en el lado Este y se encuentra a unos 70 metros, y la zona central, que se rompió en miles de pedazos), el vapor italiano ha seguido cobrándose vidas de buceadores que intentaron descubrir en las profundidades alguna pista que desvelase la incógnita o algún objeto con el que recordar esta magnífica aventura. Las personas del
Centro de Buceo de Cabo de Palos nos traerán sin duda todavía alguna sorpresa, algún detalle que no hemos sido capaces de desentrañar.
FIN